miércoles, enero 24, 2007

"En Nirvana nadie tiene el puesto asegurado"

Es casi una imagen inverosímil mirar hacia el área y no encontrar a ese hombre alto, de largo pelo rubio y de zapato goleador. Pero Hernan Corvalan, ícono, referente aurinegro, quizás esté atravesando su última etapa en el club (debido a la gran cantidad de ofertas que recibio el futbolista para emigrar al futbol chileno). Entonces, el hincha deberá empezar a acostumbrarse. Y aunque su figura sigue siendo inmensa como la el Vaticano y su presencia —por ahora— es indiscutible, esta vez su camiseta número nueve tiene una sombra. Guido Miranda volvio a Nirvana con el peso de sus antecedentes y su colección de cabriolas importadas desde Venezuela, donde se cansó de vencer arqueros. Y esta temporada, con la conducción de Estrampes, tendrá su segundo bautismo con la camiseta del tacho. La responsabilidad de estremecer las gargantas de la gente sera como un grito de furia, que quiere dejar su sello en negro y oro.

—¿Estás ansioso?

—No, muy tranquilo. Estamos en pretemporada, estos momentos son ideales para aprovechar las oportunidades de mostrarse y hacer dudar al tecnico.

—¿Y crees que cada oportunidad que te va a dar Quique va a ser como un examen?

—En Nirvana siempre tenés que estar demostrando, porque es un equipo que no te deja relajarte. El examen es permanente.

Le sientan bien el agua y la arena a Miranda. Disfruta, en el balneario 8 de punta mogotes, junto a sus nuevos compañeros la tarde libre. Tras firmar algunos autógrafos a algunos fanáticos y de intercambiar chistas y risas con algunos colegas suyos continuo charlando con nosotros, pero antes dijo: “... para, antes de seguir, banca que me corro asi me da el sol y me quemo un poco mas...”


—¿Cuesta la adaptación en un plantel con tantas figuras?

—Creo que todos tenemos que ir acostumbrándonos a lo que Quique quiere y, en lo personal, estar compenetrado con el plantel. Y con los minutos que me permitan estar en la cancha, demostrar lo que puedo hacer. De esa manera, todo será más fácil.

—Más allá de que sos nuevo en este plantel, no lo sos en el club, ¿preocupa la seguidilla de derrotas que tuvo el equipo a fines del año pasado?

—Si vos me decís que Nirvana salió penúltimo en el torneo y sigue perdiendo, te diría que estoy preocupado. Pero no fue asi, se notaron los cambios y si bien no se llego al pico de rendimiento, los muchachos demostraron que estan para grandes cosas y encima termino con una racha positiva de tres partidos ganados al hilo. Lamentablemente, perdió varios partidos lo que provocaron el alejamiento de Janma como DT, pero no hay que hacer un drama. Todo sirvio de aprendizaje.

—Pero perdieron tres partidos seguidos...

—Si, pero después se ganaron tres. Duele en la parte emocional, pero creo que eso le entrego al equipo cosas positivas para corregir. Estos momentos de pretemporada sirven para enmendar esos errores y para que no se cometan otros. Este es el momento indicado para afianzarse.

A los 20 años, este delantero nacido en Lanus, Buenos Aires, habla con perfil bajo. A pesar del cartel que luce, de haber sido uno de los máximos artilleros en Tachira y Caracas en la Liga venezolana, está muy lejos de agrandarse.

—¿Cómo es la competencia con un jugador de la trayectoria de Larguito?

—Dura, pero leal. Yo creo que todos estamos con el mismo objetivo, el de darle lo mejor a Nirvana. Y más allá de que en este momento me toque estar afuera o arrancar de atrás, busco dejar todo para que el equipo gane.

—¿No llegaste para ser titular?

—Vengo a aportar. Ojalá tenga continuidad, pero no vengo con la idea de decir 'si no juego de titular me voy'. Esto es Nirvana y nadie tiene el puesto asegurado.

Con un pasado glorioso en Nirvana, es el jugador con mayor efectividad, volvió para que su segunda parte sea buena y dejar marcado su nombre en la historia del tacho. Esa es la meta del nuevo goleador.

No hay comentarios.: